Tuesday, October 24

22/10/06 Madrid

Último día de la aventura (hasta el momento)
Hoy las sábanas tubieron más fuerza, pero igual la levantada era obligada por el horario del desayuno. Estos días en el Hotel Regente (muy bueno y con custodia de maletas gratuita), se caracterizaron por los desayunos mórbidos... huevos, tocino, fruta, medias lunas, pan, te, yogurt...ufff. De hecho hoy al terminar tuve que dormir siesta! jajaja...pero fue por el cansancio acumulado.
Fuimos a misa de 11:00 (el credo de acá es otro... o sea, creen en lo mismo pero con otras palabras) y de ahí pensar que diablos hacer hasta el vuelo de la noche.
Optamos por tomar metro y partir al museo del Prado. Como dato, los días domingos es grátis. Hay de todo: pinturas bonitas, otras no tanto, pero conocidas, y otras entre grotescas y feas (una mujer barbuda dando pecho a un bebe, o un cuadro donde la virgen está lanzando a distancia un chorro de leche desde su pecho a la boca de alguien). Nos aburrimos de ver "arte imperdible" (por el momento no explicaré el porque de las comillas) y salimos a buscar donde almorzar. Este tiempo ha sido como estar de caza... cuando hay que comer debemos buscar la presa, en lo posible algo pagable (la categoría de barato no existe acá). Hoy, cerca de la Plaza Canilejas, caímos en un restoran argentino. La primera pista del origen fue un cartel donde promocionaban "dulce de leche". Luego por las decenas de afiches de Quilmes, las banderas de boca junior y finalmente por la inconfundible "LL" del acento de la dueña. Comimos una pizza "re-buena" con masa hecha por manos argentinas según nos contó la dueña.
Y de ahí (eran las tres de la tarde... el vuelo sale, según los papeles, a las 23:45) a vagar por Madrid. Estaba lloviendo por lo que mucho no se podía hacer, así que visitamos algunas multitiendas (todo caro), una que otra vuelta y nos fuimos al hotel a buscar las maletas para emprender rumbo al aeropuerto. Si bien el metro llega hasta allá, hay que hacer optimización de grafos para determinar la ruta más corta. El resultado incluía pasar por tres lineas.
Llegamos a destino y empezamo a caminar por ese aeropuerto... pasamos por 5 bandas transportadoras y tras media hora llegamos a nuestros counters. Para variar había información confusa y a pesar de tener miles de counters, como era tan temprano había solo uno abierto. Optamos por esperar a los otros mesones y fuimos a tomar once. Su bebida y melón (raro, pero lo que se me antojó comer).
Pasamos después por la oficina de AirMadrid a preguntar por el vuelo y nos dijeron que estaba todo ok y que fueramos a los counters del 322 al 336. Bueno, esos seguían cerrados y solo operaba el 321. Empezamos a hacer la cola en que todos se ponian. Y todos los que estaban delante de nosotros tenian problemas de sobre equipaje (de hecho el loco de delante tenía una media tabla de surf).
Tras varias horas (2 creo yo), nos tocó el turno. Por mientras se veía que iba a quedar la ca... cuando abrieran los otros mesones porque la cola tenía gente de tres vuelos, y harta... Nosotros nos salvamos de esa aventura, pero no de esta:
Llegamos al mesón, dejamos las maletas y la niña nos dice que el vuelo está atrasado y que no cree que salga antes de las 4 am!... Nos iban a mandar a un hotel para que comamos y descansaramos hasta que parta el vuelo.
Salimos a esperar el bus y de a poco se fue reuniendo la comunidad chilena en retraso. Tras la llegada del bus, nos subimos en la primera oleada y partimos al hotel entre tallas y conversaciones (todo hablado en chileno!!).
Llegamos a un hotel ****s a toda raja! Mucho mejor que todos los que visitamos. Era enorme! Nos chequeamos, nos dieron el numero de pieza y el ticket del buffet (buffet! me voy a destrozar comiendo!). Optamos por ir a dejar las mochilas a la pieza y después bajar a comer... mala elección. Mientras estabamos maravillándonos con la media pieza suena el citófono: "Señores, acaban de llamar de AirMadrid avisando que el vuelo SI sale hoy. Bajen de inmediato porque los van a pasar a buscar. Plop! Adios pieza lujosa, adios buffet...
Bajamos raudamente para de nuevo congregar a la comunidad chilena y preguntarnos unos a otros "¿dónde está la cámara? esto tiene que ser una joda de video match".
Ya, muertos de la risa (no quedaba otra), volvimos en el bus al aeropuerto donde pasamos directo a nuestra puerta de embarque. Aproveché de gastar los últimos Euros que quedaban y de ahí esperar al embarque. Por mientras nos enteramos que los que no alcanzaron a tomar el bus tuvieron su otra aventura. Mientras esperaban que los fueran a buscar, entre la multitud se empezó a escuchar un rumor... era un personaje de AirMadrid que anunciaba que el avión si salía, pero como él era tan pequeño, no todos escuchaban por lo que solo parecía rumor. Los hizo ir a la puerta de embarque donde una señorita de la línea aérea les dijo que el avión SI estaba atrasado y que tenían que ir no se donde....
Conclusión: AirMadrid tiene serios problemas de comunicación interna. Ni para dar las excusas se ponen de acuerdo (en el ambiente rondaban tres versiones del retraso, todas de fuente oficial).
Al fin, embarcamos y salimos con 1 hora y 10 de retraso. Ni tan malo para la alternativa de habernos quedado allá (aunque quede con la bala pasada con el buffet)
El avión de vuelta fue el mismo de la ida...y obviamente no arreglaron las pantallitas. Esta fue la última historia de nuestra aventura por el viejo continente. Ahora vamos en el bus camino a Viña, poco a poco volviendo a nuestra tierra y realidad.

3 comments:

Nico Hidalgo said...

Jajaja... Pa que decir que nuevamente me reí mucho...! Y salgo en una de las historias... jajaja... Ya conversamos ayer... Pero no está demás decir que me alegró verte, y que todos estamos contentos por la excelente experiencia que viviste...

Un abrazo amigo!

Nico. =)

Jesu said...

muuy chistoso tu blog...
la verdad, soy muy colada por andar posteando en blogs de gente que no conozco :$ ayer también hice lo mismo :P
saluditos

Anonymous said...

Nada nuevo que decir.... no deja de sorprender tu lado humanista, q por lo visto no es mucho menor q tu atracción por los números.
Un ABrazo